miércoles, 30 de octubre de 2013

Previsión

La Previsión Social en los últimos diez años 



Mucho verso.
También mucha crítica justa. La foto puede enojar, pero la película –que suele ser en política  mas cercana a la  realidad-  muestra otra cosa.

Grandecita
La seguridad social, o el conjunto de mecanismos destinados a la cobertura de contingencias sociales que incluye a la previsión social, tiene una relevancia creciente en nuestro país. 
329 mil millones de pesos en el presupuesto nacional 2014. Se estima un crecimiento para el 2014 del 21,9%, cuando el total de gastos corrientes del Estado se estima que crecerán un 20,4.
En materia de recursos, las contribuciones de la seguridad social  suman 250 mil millones de pesos, el 29% de los recursos.

Lejos del 82% móvil utópico, pero mas cerca de la justicia social
Se comparte la idea, pero en este tema es en el que precisamente hay mucho verso.
Nunca rigió el 82% móvil en nuestro país. O mas bien la ley nacional 14499 rigió formalmente por un período 1957/1968 y en la práctica por 5 años ante el ahogo financiero. Y el 82% nunca lo fue para todos los jubilados, sino para los sectores de mas bajos haberes.
Es posible, pero no con el sistema de financiamiento a la previsión social hoy vigente.
Forma parte del imaginario y es una idea interesante, no es que no se la comparta, al contrario, como dijo Galeano: “…¿Para qué sirve la utopía? Sirve para esto: para caminar. La utopía sirve para caminar…” Y estamos caminando…

Lista corta de avances
… estamos caminando y un rápido repaso por la memoria nos dejan los siguientes pasos positivos:
+ Plan de inclusión previsional.
 + Incrementos jubilatorios masivos a los sectores mas bajos (2003- 2007)
+ Movilidad jubilatoria por ley a partir de 2008
+ Eliminación del sistema de capitalización y transferencia del sistema privado al sistema público.
+ Creación del fondo de garantía de sustentabilidad, al 30/08 292 mil millones de pesos.
Estos cinco puntos han significado un cambio revolucionario en el sistema jubilatorio, comparando foto de 2003 con foto de 2013, o si se quiere mirando la película.
(No vamos a hablar acá, por la extensión, de  la seguridad social. Eso nos llevaría a la asignación universal por hijo y otras políticas sociales que refuerzan el concepto de cambio revolucionario)

Hacia la universalidad
Para uno sólo de los cambios citados alcanza  la extensión de la nota: el plan de inclusión previsional. El que fuera desarrollado a partir del gobierno de Néstor Kirchner
Un material, que fuera expuesto hace poco tiempo por la abogada Elsa Rodriguez Romero en el marco de la Diplomatura en Previsión Social que dicta el Consejo Federal de Previsión  Social, aporta la siguiente información:
+ Entre los años 2003 y 2012, los beneficiarios del Sistema Previsional Argentino pasaron de 3,1 millones a  5,7 millones-
+ La tasa de cobertura de los adultos mayores entre los años 2003 y 2011 paso del 66% al 95%
+ La tasa de cobertura redujo la disparidad entre regiones del país, pasando el NEA –la que mas mejoró en forma relativa- de tener en el año 2006 un 26% de cobertura al 74,6 en el año 2011.
+ Entre los años 2006 y 2011, la tasa de cobertura en la Provincia del Chaco creció del 28,4% al 78,7%, la segunda provincia en mayor crecimiento. En igual período la Provincia de Formosa lideró el crecimiento, del 16,7 al 72,8%.

La plata de los jubilados
Otro concepto bastante instalado es que todo recurso que administra la Anses es “la plata de los jubilados”, llevando a un concepto erróneo respecto del origen de los fondos, de su sostenimiento en el tiempo como tal manteniendo su poder adquisitivo e incluso respecto de su destino.
Respecto del origen, podemos decir que los recursos del sistema de previsión social, desde hace mucho (pero mucho, mucho) tiempo no está financiado sólo con aportes jubilatorios. O sea, están financiados con impuestos de la mas variada gama y especie, e incluso con el 15% de la masa coparticipable. Hace mucho tiempo, nuestro país resolvió que la seguridad social (también la previsión) es necesario desarrollarla y financiarla para y por el conjunto de la sociedad. A pesar de los ladrones que toquetearon esos fondos con otros fines y distorsionaron algunos conceptos, ese criterio está escrito en un sinnúmero de normas y así es aplicado.
Respecto del sostenimiento de esos fondos en el tiempo, podemos decir que ninguna estrategia es válida si los recursos no están involucrados en el sostenimiento del nivel de actividad económica. Es interesante y otorga cierta tranquilidad una reserva como la que tiene el Fondo de Garantía de Sustentabilidad, porque la seguridad social (menos aún la previsión social) pueden estar atadas a vaivenes. Pero esa reserva pierde peso y valor de su existencia si no tiene una aplicación que le permita sostenerse en el tiempo. Dicho de otra manera: no podemos poner los fondos en una lata para sacarlos cuando los necesitamos, tienen que jugar un rol de reproductor de la economía y se requiere su aplicación e inversión –garantizada y transparente- en actividades productivas y no financieras (no a la timba, por favor).
Pero el concepto “plata de los jubilados” distorsiona también el análisis del destino de semejante masa de fondos. Jubilados somos todos podríamos decir, o lo seremos. Claro está debemos garantizar una vejez digna, para eso TAMBIEN está la seguridad social (mas aún la previsión social). Pero si hablamos de fondos generados por toda la sociedad su sostenimiento en el tiempo debe estar al servicio del crecimiento económico y la distribución equitativa de la riqueza, en otras palabras no hay sistema de seguridad social ni previsión estable sin una economía en funcionamiento con distribución justa de la riqueza.

En el Chaco
La onda de los mayores derechos fue expansiva.
Además del alto impacto citado por la política nacional en nuestra Provincia es importante recordar acá algunas cuestiones respecto del sistema previsional provincial, cuyos beneficiarios son trabajadoras y trabajadores del Estado.
La primera de ellas es que estuvo 10 años de  emergencia y afectando a decenas de miles de personas en materia de aportes y cálculo de haberes previsionales. No es que le vamos a desconocer acá a Ángel Rozas su ampliamente publicada defensa de la jurisdicción provincial del sistema cuando el menemismo y las instituciones financieras del establishment propugnaban su transferencia  a la jurisdicción nacional para demoler derechos. Pero debemos sí recordar que el mismo AR se ocupó de mantener durante todos los años de su gobierno un sistema de descuentos y cálculos de haberes altamente perjudicial para los trabajadores
La segunda de ellas es que a partir del año 2008 se ha producido un cambio sustancial de la forma de cálculo de los haberes, que me animaría a decir es uno de los mejores –sino la mejor- de nuestro país. Hubo que esperar el año 2008 y una determinada correlación política para que se establezca el cálculo del haber jubilatorio sobre las 120 mejores remuneraciones mensuales activas actualizadas.
Y una cuestión que no debemos olvidar, más especialmente el universo cubierto por éste sistema previsional, es la amplitud del reconocimiento de derechos y protección que significa. No sólo en lo que respecta a la forma de cálculo citada, sino también su movilidad, la edad de acceso y otros aspectos que, por otra parte, no reconoce sistemas de privilegio. Muchos de esos aspectos han sido plasmados en el Artículo 75 de la Constitución Provincial.

Falta mucho, muchísimo
Y no va a ser fácil.
El sistema rentístico que lidera el sistema capitalista actual no creo que facilite las cosas.
Pero debemos continuar trabajando para una mejor –y mas equitativa- protección de las contingencias sociales.

Publicado en Diario Primera Línea del 28/10/2013
Ilustración Página/12 26/08/2008

domingo, 20 de octubre de 2013

El debate/La violencia política y social

DEBATIENDO

 
Se está poniendo de moda, y no tanto. Y ojalá no sea una moda. Debatir.
Debatir públicamente con determinadas reglas, candidatas y candidatos de propuestas diversas, moderados por periodistas y ante un medio de prensa.
Lo hemos visto con postulantes de la Ciudad de Buenos Aires (CABA) y también dos candidatos a senadores del Chaco.

Está bueno

Que las ideas confronten, que las propuestas o proyectos se visualicen y que, ¿porqué no?, se expresen las diferentes visiones de la historia.

Un duelo de ideas, en estos tiempos electorales, puede colaborar con despejar lecturas. Con mostrar –valga la redundancia- miradas diversas, y ayudar a decodificar –si se me perdona la palabra- ideologías.

No es usual que quienes estén mejor en las encuestas, y en éste caso incluso obtuvieran mejores resultados en las PASO, se sometan a un debate dado que generalmente se opta por hacer “la plancha”. En ésta ocasión aparecen algunos elementos de la coyuntura que habilitan la aparición del debate, por ejemplo en la CABA la disputa en cercanía de las diferentes fuerzas políticas y, también para destacar, el FPV de Chaco que aceptó el debate cuando el manual en la materia sugiere evitarlo.

La tarea es trabajar para que la herramienta se convierta en permanente, y se corrijan algunas cuestiones.

Convengamos que no estamos ante una panacea. No resuelve los problemas de la representación de la política. Pero ayuda.


Lo que falta

Imperfecto. En reglas, en amplitud de los participantes, en acceso masivo de ciudadanas y ciudadanos.

Es bueno que los medios se animen y convoquen, no es una tarea fácil. Pero la cuestión debe estar en manos del Estado, para garantizar difusión masiva (¿porqué no una cadena nacional y/o provincial?). Y deberíamos pensar como se expresa el pueblo en el debate. Tal vez no un debate, sino mas de uno, y buscando un contenido de ida y vuelta a través de la participación de vecinos o participación por vía de las redes sociales.

La exclusión de otras listas del debate lo deprime, polariza, resta oportunidades y visibilización a otras propuestas. También achancha a los contendientes, que tienen que preparar su discurso para contendientes muy previsibles.


(Sería bueno que Ángel Rozas y Eduardo Aguilar le cuenten a sus colegas de las otras categorías de las listas que están debatiendo y que el debate no muerde, así Carim Peche, Elda Pertile, Juan Manuel Pedrini y Miguel Tejedor podrían animarse a seguir ese camino)


Adelante vs Historia

“Yo no vine hablar de la historia”, dijo un candidato e inmediatamente descerrajo una chicana sobre la historia reciente.

Una de las cuestiones a dilucidar y que aparece a menudo es ¿qué debatimos? ¿Hablamos de propuestas o hablamos de la historia? La primera respuesta, políticamente correcta, es: hablemos de lo que vamos a hacer, de lo que proponemos. Me parece que eso pura demagogia.

¿Cómo podríamos discutir una propuesta sin partir de una lectura de la historia? ¿No está en la historia la explicación o la causa del problema que pretendemos resolver?

O más aún, ¿la historia de las personas que se postulan y proponen no tiene relación con la posibilidad concreta de que la propuesta sea viable o cumplible? Una síntesis a lo bruto: si Adolf Hitler se postulara con las mejores propuestas de un cambio social positivo ¿lo votaríamos sin considerar su historia?

Mas allá del vicio serio del sistema político de caer en la chicana, que se debería erradicar, la historia no puede estar ausente del debate. Los acontecimientos del pasado reciente, e incluso no tanto, tienen una influencia superlativa a la hora de debatir propuestas y encontrar soluciones. Es imposible  trazar un futuro sin mirar la historia, e imposible construir una visión de futuro sin una lectura de errores y aciertos del pasado.


Otros debates, estructurales y fuera de campaña

Un debate señero, y que seguramente quedo en la memoria de quienes lo vieron fue el que mantuvieron el ex Canciller Dante Caputo con el Senador Vicente Saadi en el marco de una consulta popular sobre el Canal de Beagle. No era un debate electoral en el sentido estricto, aunque había una compulsa en juego. Dejó aprendizajes. Corría el año 1984 y hacía presumir un futuro venturoso de debates pero no pasó.

La cultura del debate, amplio y sobre temas estructurales de la Provincia y la Nación y no necesariamente electoral, debería instalarse como una forma de desestructurar viejos versos que se instalan desde ciertos sectores y que luego se repiten como verdades absolutas.


La Ley

En el Chaco hay una Ley de debate obligatorio. La 7217, aunque su vigencia efectiva será en 2015, aborda algunos tópicos que aquí se tocaron: el Estado en la organización, cierta amplitud de los sectores que se convocan y un método. Esperemos que no se derogue o distorsione, como ha pasado con la Ley de las PASO en materia de financiamiento y publicidad.


ALGO SOBRE LA VIOLENCIA POLÍTICA Y SOCIAL EN EL CHACO



El tema requiere mas extensión, tiempo y análisis. Pero merece unos párrafos, dada la denuncia de la UCR del ataque a sus dirigentes cuando llevaban adelante su campaña sobre el Impenetrable.


Es, existe

La violencia política y social existe. Ejercida por sectores políticos y sociales contra otros sectores políticos y sociales, una suerte de mini cultura del enemigo, incluso con utilización de algunos espacios estatales.


¿Reacciones o Hipocresía?

Se la ejerce esporádicamente, a la violencia, se la repudia y los sucesos pasan al olvido. La máxima reacción desde la política es el repudio, aunque en algunos casos ni a eso se llega.

Cuando se avecinaban las PASO, un pequeño local partidario de la fuerza política a la que pertenezco en Miraflores –coincidentemente el Impenetrable- recibió un intento de incendio. Acción judicial: cero. Innumerables repudios: cero.

El Poder Judicial mira para otro lado.

La represión policial a sectores sociales en el Chaco una veintena –o más- de veces en los últimos años no mereció acción alguna del Poder Judicial.

El ingreso de una patota a la Cámara de Diputados de la Provincia en el año 2009 para impedir la designación de un presidente, algo bastante parecido a la sedición, generó un expediente judicial ¿alguien sabe que pasó?

Aurelio Díaz fue cobardemente golpeado hace unos años en mi despacho de Diputado Provincial por un alfil de una de las principales dirigentes de la UCR. Repudio legislativo y archivo.


Bomba de tiempo

El Poder Judicial mira para otro lado y la política repudia, en el mejor de los casos.

Pero nadie  hace mucho contra esa bomba de tiempo. Ya que usamos la palabra usémosla de nuevo, una mini bomba de tiempo para no exagerar.

La cultura política de la convivencia es mayoritaria, ampliamente, y la violencia con fines políticos no es lo central. Pero hay violentos, y peor aún, hay vivos que los mantienen latentes.


Publicado en Diario Primera Línea del 20/10/2013

lunes, 14 de octubre de 2013

FMI

Fondomonetizando

La arquitectura financiera internacional es una de las peores cosas del mundo actual. Refleja la correlación de fuerzas donde se impone un poder parasitario, orientado a la renta por la renta misma sostenida en un gran castillo de naipes que cada tanto pierde un pedazo.

FMI, una parte del sistema
Podríamos hablar de muchas partes de ese sistema parasitario: bancos, Banco Mundial, CIADI, etc., pero vamos a pensar un poco en sólo una de esas partes, mínima, de esa arquitectura: el FMI.
Cuando un economista, aunque puede ser cualquier otra persona, te habla de volver al FMI pará la oreja. Seguro que no te está defendiendo.
El FMI ha sido la herramienta que tradicionalmente utilizaron los capitales extranjeros para condicionar las políticas económicas y sociales de un país con vistas a defender los intereses de capitales trasnacionales y acreedores externos.
Nacida en la segunda posguerra, en una Convención de la ONU en Bretton Woods, el FMI fue puesto en marcha con papeles que decían que ayudaría a la estabilización financiera, a facilitar el comercio internacional, a un nivel elevado de empleo, la estabilidad económica  y hacer retroceder la pobreza.
Nada tan alejado de la realidad como esos objetivos.
El FMI representa los intereses de un puñado de países centrales, de sus empresas mas poderosas y especialmente de los bancos mas grandes del mundo. Nada que ver con la economía real, si con la virtual que conduce realmente el mundo.

El Consenso de Washington
Sin que sea una definición, el CdeW es un conjunto de ideas sobre las cuales se estructuró el modelo neoliberal de los últimos 30/40 años. Reducción del gasto público, reforma tributaria con impuestos al consumo y regresividad tributaria, liberalización financiera y libre circulación del capital, altas tasas de interés, privatizaciones, desregulación de los mercados, liberalización del comercio internacional, control de la inflación como parámetro central de la economía, son algunas de las ideas económicas.
El FMI ha sido, es, el brazo de presión intelectual y de una supuesta asepsia u objetividad, al servicio del Consenso de Washington.

Perón
El presidente argentino Juan Domingo Perón resistió la  incorporación de Argentina al FMI. Dice en 1967 al respecto:
“…Cuando en 1946 me hice cargo del gobierno, la primera visita que recibí fue la del presidente del Fondo Monetario Internacional que venía a invitarnos a que nos adhiriéramos al mismo. Prudentemente le respondí que necesitaba pensarlo y, enseguida, destaqué a dos jóvenes técnicos de confianza del equipo del gobierno para investigar a este ”monstruo tan peligroso”, nacido según tengo memoria en los sospechosos acuerdos de Bretton Woods. El resultado de este informe fue claro y preciso: en síntesis, se trataba de un nuevo engendro putativo del imperialismo….”
Y es cierto, Argentina adhirió al FMI en abril del 1956, bajo el gobierno de la “revolución fusiladora” , y su presencia nos acompaña hasta nuestros días donde nada hace pensar que desarrolla políticas a favor de argentinas y argentinos.

Mas amigo de las dictaduras, pero siempre duro
Como se dijo, el FMI debutó en Argentina durante la dictadura iniciada en 1955.
Con Arturo Fondizi fue generoso. Con Jose Maria Guido y su ministro Alvaro Alsogaray, tuvo algunas asperezas que luego fueron generosamente salvadas. Plena sintonía con Juan Carlos Onganía. Duros con don Arturo Illia, que no sintonizó con las políticas neoliberales pero no rompió relaciones. Durísimo con los gobiernos peronistas de 1973 a 1976 donde el ministro de economía Jose Ber Gelbard ejecutaba una política en contradicción a sus lineamientos, con fuerte énfasis en el mercado interno.
La dictadura 1976/83 fue un momento de éxtasis de las relaciones con el FMI. El mayor endeudamiento, fuga de divisas, endeudamiento ficticio para comprometer la continuidad de las empresas del estado, entre otras cosas. Una relación de amigos
Con Raúl Alfonsín en la presidencia, el FMI tuvo sus momentos de tensión pero el gobierno terminó cediendo. La tensión tiene su síntesis en la anécdota del ministro de economía mas digno de la etapa, Bernardo Grinspun . "Si querés que me baje los pantalones, me los bajo", le dijo Grinspun al representante del FMI, Joaquín Ferrán,  le dio la espalda y se los bajó.
Ni que decir con Carlos Saúl Menem donde se llegó a la cúspide de las relaciones siendo presentado nuestro país como un ejemplo internacional para el FMI, el mejor alumno. La aplicación de todas y cada una de las reformas “propuestas” por el FMI nos valió esa distinguida medalla: privatizaciones, transferencia del sistema previsional, reforma laboral, BCRA “independiente”, reforma educativa privatista, ajustes, reducción de salarios, apertura de la economía, despidos de trabajadores del estado, etc. etc.
La Alianza continúo, casi por inercia, esa política del menemismo hasta el estallido de la convertibilidad, cuando el FMI se resistió a mantener la provisión de dólares que fugaban sistemáticamente hacia el exterior.

En la agenda diaria
Quienes hemos vivido los 80 y los 90 no lo podremos olvidar. Cada misión del FMI que desembarcaba en el país era tapa de los diarios, días o semanas de tensión sobre las condicionalidades y, por fin, anuncios de acuerdos. Acuerdos que desembocaban, a veces públicamente a veces no, en decisiones políticas en contra del pueblo como las ya citadas.
Siempre. Siempre. Desde aquel abril del 1956 hasta la presidencia de Néstor Kirchner el FMI fue un protagonista privilegiado del acontecer económico, y quien dice económico dice social. Y pugna por seguir siéndolo.
El barniz que habitualmente utiliza el FMI es dar opiniones técnicas, disfrazadas de posiciones neutras, pero que llevan detrás de sí una gran carga ideológica a favor de su representación.

Kirchner
La transición institucional de los gobiernos pos Alianza mantuvo una relación, tensa en algunos momentos, pero relación sin ruptura. Y los condicionamientos siguieron fluyendo.
El 15 de diciembre de 2005 el presidente Néstor Kirchner anuncia la cancelación de la deuda con el FMI de alrededor de 10.000 millones de dólares. No era el quantum, tampoco los intereses ni la falta de voluntad de refinanciarla. La inaceptable presión permanente sobre las políticas que restan autonomía al gobierno, que minimizan valor a la voluntad popular, llevaron a Néstor Kirchner a tomar la decisión.
Para las economías regionales nada
El impacto de las políticas impulsadas por el FMI sobre las provincias fue demoledor. Se acuñó el concepto de “Provincias Inviables”. Lo único importante para el organismo financiero era impulsar la privatización de los servicios públicos, bancos y sistemas previsionales (Si hasta Ecomchaco SA estuvo en esa agenda).
Sangrientos ajustes se aplicaron sobre las provincias que hubieran sido peor sin la resistencia de los sectores populares. La cosa era libertar recursos para que el Estado Nacional los derivara a los negocios de los sectores privilegiados.

Otra arquitectura financiera
Los últimos dos presidentes impulsaron la construcción de otra arquitectura financiera. Tanto Néstor Kirchner como Cristina Fernández desarrollaron una política diferente en la materia, especialmente sostenida con la articulación latinoamericana. El camino no ha sido fácil y no se han visto los frutos, pero es el sentido sobre el que habrá que seguir insistiendo. Un mundo enfocado en las personas donde lo financiero esté al servicio de lo popular y no al revés.
En el mientras tanto, la relación con los dueños del mundo debe ser desde acuerdos con países críticos con el actual funcionamiento, sean de Latinomérica, de África o de Asia y porqué no de Europa si aparece alguno.

El fantasma sigue rondando…
 … o ¿no es un fantasma?
Alguien podrá preguntarse ¿porqué hablar de éste tema ahora? ¿no es parte de un triste pasado?
El acontecer del mundo y las ¿resoluciones? que se toman en el mundo en problemas nos llevan a pensar que no.
Muchas y muchos -no sólo en la oposición política o en la ortodoxia económica- proponen el diálogo con estos sectores, una mesa donde los platos se distribuyen de tal manera en que no estamos los argentinos.

El peligro continúa…



Publicado en Diario Primera Línea del 13/10/2013

lunes, 7 de octubre de 2013

Yo presupuesto, tu presupuestas, el...



PRESUPUESTOS

Septiembre es el mes de los presupuestos públicos. El 15 el Poder Ejecutivo nacional debe elevar el  presupuesto,, y lo propio tiene que hacer el provincial el 30. De octubre en adelante se discute ésta herramienta clave de políticas públicas y privadas.
Un ingrediente adicional para hablar de la cuestión es el conflicto político que tiene paralizada la administración pública en EEUU.
No es poca cosa.

Políticas no números: importa el tamaño
No vamos a hablar mucho de números, no es ésta una opinión técnica. Vamos a hablar de la política del presupuesto.
Pero es bueno tener en cuenta que el presupuesto general de la administración nacional para el 2014 suma en erogaciones $ 859.542.689.425, o sea casi 860 mil millones de pesos. Y el de la Provincia del Chaco  $ 18.922.646.500, casi 19 mil millones de pesos.
En el año 2000 esos presupuestos ascendían a $ 48.175.599.235 y $ 1.003.001.600, respectivamente. Casi 18 veces aumentó en 14 años el nacional y casi 19 veces el provincial, todo un número.

Hubo un tiempo que no fue hermoso
Por supuesto que las dictaduras no debatían presupuestos. Sin Congreso y con persecución es poco probable que se debata. Cuanto más un par de reuniones con sus patrocinadores, los empresarios locales concentrados, las patronales agropecuarias y los delegados de los capitales multinacionales, y listo. Guardaron las formas de dictar una “ley” que de ley no tenía nada.
Los 80, y parte de los 90 se caracterizaron por tener presupuestos tardíos (ver cuadro anexo).Se impone normativamente la aprobación legislativa  previo inicio del año calendario. Sin embargo el primer presupuesto nacional pos dictadura aprobado con esas previsiones fue el del año 1992, desde el cual –con la sola excepción del presupuesto 2002- todos han cumplido ese requisito.
En cambio en la Provincia del Chaco hubo que esperar hasta el año 1999 para lograr ese objetivo, aunque se retornara al atraso al año siguiente y hasta el ejercicio 2004.
La temporalidad no es una mera cuestión formal. El presupuesto es una formulación que permite pensar la evolución de las variables económicas y sociales y definir el rol que el Estado tendrá sobre esa realidad para modificarla o legitimarla. Aprobar un presupuesto transcurrido medio año, 10 meses o hacerlo al año siguiente es sí convertirlo en un pedazo de papel inservible sometido al control inservible de los organismos constitucionales y legales con tal fin.
Por esos tiempos el presidente Raúl Alfonsín dictada decretos secretos para modificar el presupuesto, por ejemplo el 3655/1984.

Hubo un tiempo desastroso (no para todos)
Los 90 le agregaron un par de ingredientes picantes. Domingo Cavallo, ya veterano de los despachos y de la política, hábil operador de los sectores mas conservadores y privilegiados de la  economía realizó dos transformaciones centrales.
Por un lado, se aprobó una nueva Ley de Administración Financiera que convirtió al presupuesto en una suma total de ingresos y egresos debajo de la cual muy poco se podía discutir. El Poder Ejecutivo tiene todas las facultades de modificar por debajo de esos totales sin discusión. Las Provincias replicaron con puntos y comas esa ley por aquellos años. Esas normas siguen vigentes.
Por otro lado, la dupla Menem/Cavallo  transformo el presupuesto en una súper ley que introducía variadas disposiciones colectivas ajenas a él. Por citar un ejemplo, la Ley de Presupuesto del año 1994, en su artículo 29 ratificó 16 decretos del Poder Ejecutivo, incluyendo el mítico 2284/91, obra de arte de terror del neoliberalismo que entregaba aspectos centrales de la economía al “libre mercado”.
Por aquellas épocas, el presupuesto era  un mecanismo de programación económica en un Congreso rendido al neoliberalismo.
Por esos tiempos el presidente Carlos S. Menem dictada decretos secretos para modificar el presupuesto, por ejemplo el 1057/1995.

El debate sobre las estimaciones
Se celebra por estos días el debate del presupuesto 2014 en el Congreso Nacional. Fiesta de la democracia debatir proyecciones económicas, su veracidad o exactitud.
Hace un tiempo no muy largo, a éste mismo gobierno y su antecesor se le decía que las cifras se subestimaban. Hoy  se le dice exactamente lo contrario. El presupuesto tiene aspectos diversos para el debate, el tamaño del gasto y su distribución, el tamaño de los ingresos y sus fuentes, pero en general desde la crítica se selecciona el mas abstracto: las proyecciones macroeconómicas.
Crecimiento del PBI, inflación, tipo de cambio, etc. están en el ojo de la tormenta.  Justamente se debate las variables que son “consecuencia de”  y no causa del presupuesto dejando de lado las variables mas controlables. Y se pretenden asignar a esas proyecciones macro el concepto de verdad inmutable, pretendiendo desconocer que son una evaluación del impacto de las políticas que se programan y no un dato matemático. Es economía, no cálculos, y pueden no verificarse con exactitud pues no son pronósticos meteorológicos (aunque éstos últimos también suelen no verificarse).
Siempre el presupuesto expresa una idea de país, un proyecto político. Y como nunca en los últimos años el debate público lo demuestra. Y la oposición se suele venir perdiendo la oportunidad enfocándose principalmente en esas proyecciones.
El extravío de la oposición política dejo un precedente maloo: en el año 2011 Cristina Fernández debió gobernar sin Ley de Presupuesto.
Por estas épocas no hay decretos secretos.

Allá no se consigue
No admiro ese país. No me identifico con sus políticas y sus rasgos individualistas. El imperio no le hace bien al mundo.
Pero es bueno para pensar lo que acontece en EEUU. Un gobierno que de popular no tiene nada sufre el bloqueo presupuestario de los sectores mas conservadores de su sistema político. Y hace días están sin presupuesto

Algunas perlas locales. ¿Presupuestos o pos-supuestos?
Desde 1984 para acá, en 30 años de presupuestos, algunos datos sobre el Chaco :
* El primer presupuesto aprobado en el plazo correspondiente fue el de 1999. Fue el único aprobado en tiempo en los 8 años de gobierno de Ángel Rozas.
* Roy Nikisch y Jorge Capitanich hasta la fecha, fueron los únicos gobernadores que tuvieron todos  los presupuestos aprobados antes de empezar cada año de ejecución.
* Una vez se utilizó el procedimiento de veto por el Poder Ejecutivo, fue en el año 1997.
* Durante el gobierno de Ángel Rozas se inauguró un procedimiento extraño. La modificación del presupuesto transcurrida su ejecución. 4 de los 8 presupuestos de sus sucesivos gobiernos sufrieron ese procedimiento que transformó al pre-supuesto en un pos-supuesto. El más extraño fue el de 1999, que se modificó en marzo de 2001. ¿problemas con organismos de control?.
* Roy Nikisch modificó el procedimiento de Rozas: todos los meses de diciembre impulsó la modificación de su presupuesto anual.
* En el gobierno de Jorge Capitanich se continúo con el procedimiento de Nikisch para los presupuestos  2008 y 2009. En agosto de 2011 se modifica el presupuesto 2010, volviendo a la tradición de A.R.

Defensa del presupuesto
Vilipendiado, criticado, un dibujo. Con una construcción técnica que dificulta el acceso popular.
Aunque perdió su importancia como herramienta de control por su desnaturalización legal y la fala de apego de los funcionarios a su utilización, el presupuesto público continúa siendo una herramienta central de política económica y uno de los puntos culmines de debate y eventual tensión entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo.

Publicado en Diario Primera Línea del 06/10/2013